Seguramente ya has oído hablar de la conexión entre nuestro cuerpo, mente y alma.
A lo mejor te suena como algo de la ‘nueva era’, un poco esotérico. Pero hoy quiero hablarte del sentido práctico y científico sobre la conexión entre estas tres partes de nuestro ser.
Somos seres integrales, que necesitamos tener un equilibrio entre mente, cuerpo y alma para poder estar en paz, gozar de salud y un bienestar general. Soy mente, cuerpo y alma.
Si pones la conciencia en ti puedes identificarte con tu cuerpo fácilmente. El cuerpo es algo tangible y lo vives todo el tiempo. Aunque muchas veces lo ignoras o no te gusta mucho, el cuerpo se hace sentir todos los días.
Algo similar pasa con la mente; aunque no puedes tocarla, sabes que está ahí porque te habla frecuentemente. Opina de todo y hace juicios en cada momento. Muchas veces la ignoras o simplemente no sabes cómo pararla, así que te haces inconsciente de lo que te está diciendo todo el tiempo.
El alma es más difícil de identificar. Es algo intangible e indescriptible. Si estás acostumbrado a tener una práctica espiritual seguramente estás familiarizado con tu alma y has llegado a sentirla. Sin embargo, en el día a día se siente un poco borrosa a menos que pongas tu atención plenamente en ella. Sin embargo, el alma dirige muchas de nuestras acciones y nuestros pensamientos.
Conexión entre mente, cuerpo y alma
La mente y el cuerpo están íntimamente interconectados. Está científicamente comprobado cómo nuestra mente tiene un impacto directo en nuestro cuerpo y cómo estos dos se hablan constantemente.
Nuestros pensamientos cambian nuestra biología y nuestra biología altera nuestros pensamientos.
Te voy a pedir que hagamos un experimento:
- Quiero que comiences a ser consciente de tu cuerpo. Observa cómo está tu respiración, tu temperatura. Evalúa si sientes alguna tensión en alguna parte del cuerpo.
- Ahora piensa en un momento del pasado que haya sido muy muy emocionante. Algo que te haya hecho gritar, saltar, bailar o llorar. Trata de recordar algunos detalles de ese momento. ¿Con quién estabas? ¿En dónde estabas? ¿Qué estaba pasando?
- Vuelve a ser consciente de tu cuerpo. ¿Estás notando algunos cambios físicos o fisiológicos? ¿Puedes notar cómo de pronto tu respiración se aceleró? ¿Comenzaste a sudar o sientes más frío que antes de hacer el ejercicio? ¿Tu corazón late más rápido?
Esta es una demostración al instante de cómo nuestra mente y nuestro cuerpo se comunican.
Es casi instantánea la reacción de nuestro cuerpo. Esto sucede porque nuestra mente puede alterar los neurotransmisores y los impulsos eléctricos que nuestro cerebro emite para que nuestro cuerpo reaccione a las diferentes situaciones de la vida. Pueden ser situaciones emocionantes, estresantes, alegres, tristes, angustiantes.
Al mismo tiempo si tenemos una sensación en el cuerpo, la mente traduce esto a un sentimiento y a un pensamiento casi instantáneamente. Por ejemplo, Si comes un helado de chocolate, tu cuerpo siente el sabor y el frío, lo cual hace que la sensación se traduzca en una emoción y a su vez en un pensamiento.
Ahora quiero que veamos otra situación. ¿Recuerdas un momento específico que te evocara algún recuerdo y te transportara a una situación del pasado?
Te pongo un ejemplo: Tal vez oliste algo que te hizo recordar la casa de tus abuelos, e inmediatamente recordaste una situación con tus primos. Tu cuerpo y tu mente comienzan a revivir esa situación. Tu mente, recordando los detalles y tu cuerpo recordando las sensaciones.
Nuestra alma es la que le da un poco de dirección a todo esto y la que nos ayuda a encontrar un norte. Es la que nos ayuda también a encontrar paz.
El balance entre cuerpo, mente y alma
Para tener un bienestar total es importante encontrar un balance entre estos tres aspectos de nuestro ser.
Es por esto que creé el programa Salud Increíble para todos los días. De esta manera podemos trabajar en cuerpo, mente y alma para alcanzar la armonía necesaria. La salud increíble tiene como principio tener un bienestar en cuerpo, mente y alma.
Sanar el alma y la mente para sanar el cuerpo.
Aquí van mis principales tips para que puedas tener un alma y mente sanas, de manera que te ayuden a sanar tu cuerpo.
- Cuida tus pensamientos
- Aprende a respirar
- Busca espacios de silencio
- Ten una práctica espiritual
Sanar el cuerpo para sanar la mente y el alma
Si el cuerpo está intoxicado, es muy difícil que puedas tener una mente sana y un alma alegre y en paz.
Para sanar el cuerpo debes practicar y adquirir hábitos de vida saludables:
- Aliméntate bien
- Hidrátate adecuadamente
- Descansa y tómate en serio el dormir
- Mueve tu cuerpo para mover tu energía
Fluir para mantener el equilibrio
Cuando pensamos en equilibrio o balance a veces pensamos en algo estático, algo que cuando se alcanza debe permanecer inmóvil. Lo cierto es que el equilibrio es una danza, en donde siempre va a haber aspectos que bajan y otros que suben. Algunas cosas mejoran, otras retroceden. Por eso el equilibrio y el bienestar de cuerpo, mente y alma es algo dinámico que debemos aprender a apreciar.
El equilibrio se trata de vivir el cambio, fluir con él y adaptarse.
A veces no es tan fácil hacer estos cambios. El cambio es un maestro porque nos muestra lo mejor de nosotros mismos y a la vez nos recuerda de la importancia de la flexibilidad y de la humildad. Cuando afrontamos el cambio de manera natural, podemos aprovechar mejor las situaciones y la vida se hace más fácil.
Te invito a que vayas a ver mi programa La Maestría del Cambio en donde te enseño a cómo poder hacer cambios en tu vida de manera sistemática. De esta manera la próxima vez que estés pasando por un cambio o que te decidas a cambiar, sabrás exactamente cómo afrontarlo.
Un comentario
Me gustaria saber como hacer los cambios ,que son tan dificiles de hacer