Cuando hablamos de salud, la mayoría de nosotros nos referimos a la enfermedad. La forma de practicar la medicina en nuestra sociedad y que define las formas en que los sistemas de salud están diseñados, se enfoca en el manejo de la enfermedad, mas no el cuidado de la salud. Esto en un contexto en el que a nivel mundial los sistemas de salud cada vez se encuentran en una situación más compleja enfrentando grandes retos producto del envejecimiento poblacional en algunas regiones del mundo, mayor expectativa de vida pero al mismo tiempo las poblaciones están cada vez más enfermas, lo que trae altas cargas a los sistemas de salud en todo el mundo.
En la actualidad, las enfermedades crónicas son la principal causa de morbi-mortalidad en la mayoría de países y nos encontramos ante un escenario que requiere que cambiemos radicalmente la conversación en cuanto al manejo de la salud. Se estima que en Estados Unidos, 6 de cada 7 muertes se debe a alguna enfermedad crónica y a nivel mundial hay una cifra similar del 70% de las muertes por esta causa. En Colombia, se calcula que un entre un 18% y 20% de la población tiene obesidad, 5 a 8 de cada 100 personas están diagnosticadas con diabetes y 24% de la población tiene hipertensión. Adicionalmente, en nuestro país alrededor de un 5% de la población puede estar diagnosticado con alguna enfermedad autoinmune.
No resultan suficientes la innovación, los avances tecnológicos, el aumento de los presupuestos para el gasto público y privado en salud, cada año vemos crecer estas cifras de incidencia de enfermedades que son prevenibles. El problema está en que hemos diseñado un sistema de salud reactivo, dispuesto a tratar síntomas y enfermedades, más no a encontrar, tratar y prevenir las causas de enfermedades que se han convertido en problemas de salud pública, no se evidencian grandes esfuerzos en fortalecerlos planes y programas y llevando la prevención y la promoción a convertirse en el centro de la política pública.
Los esfuerzos en prevención de la enfermedad y promoción de la salud son insuficientes. Tratamos a las personas cuando llegan a los médicos, a veces muy tarde para que las intervenciones que se hagan sean eficientes o costo-efectivas. Cada vez necesitamos tratamientos más costosos e invasivos. Y aún así, seguimos enfrentando el mismo problema.
¿Por qué es importante que cambiemos la conversación en salud y la forma cómo manejamos el sistema? Una gran cantidad de estas intervenciones se podrían prevenir o minimizar si tomamos la decisión de que nuestros sistemas de salud inviertan nuestros recursos, atención y esfuerzos en prevenir las enfermedades que nos aquejan mediante la promoción de la salud y la prevención de factores de riesgo. Para esto, es necesario cambiar la conversación en salud, diseñar un marco de políticas públicas , desarrollar una cultura ciudadana y cambiar el estilo de vida de los individuos.
En Lovehumankind soñamos con un mundo en donde los hospitales y clínicas se encarguen de acompañar a las personas, enseñándoles a llevar una vida más saludable y a tomar acciones en pro de su salud. Trabajamos para que los médicos vuelvan a tomar su rol principal, que es el de guiar y enseñar a las personas a mantener un estado de bienestar completo. Buscamos que las comunidades se conviertan en un ambiente que facilite e invite a una vida saludable y longeva.
Esto se logra mediante la activación a nivel individual, la construcción de comunidades y ambientes que ayuden a las personas y el diseño de un sistema que premie los comportamientos saludables.
Es necesario que cambiemos la conversación en salud. Cambiemos el foco reactivo por uno proactivo. Cambiemos la imagen del paciente como víctima, a personas empoderadas, co-responsables y capaces de contribuir al manejo de su salud. Con esto no pensamos que podríamos erradicar todas las enfermedades, o que los fármacos y demás tratamientos se volverán obsoletos. Por el contrario, podremos ser más eficientes en el uso de estas tecnologías que sin duda salvan vidas.
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4 comentarios
Me gusta mucho esa manera de ver la salud, porque siempre nos referimos de ella cuando no la tenemos.
Gran iniciativa, un sueño muy potente y especial
Todos los que trabajamos en la salud queremos detecciones tempranas por lo tanto debemos trabajar mas en conciencia de salud ambientes saludables volver al origen y dejar de vivir en automático. Esa es la razón principal de nuestras enfermedades la falta de cuidado y respinsabilidad con nuestros emociones, nuestros alimentos y nuestros hábitos.
Esclavos del trabajo.
Ma Fernanda. Este ha sido un sueño que con seguridad lleva décadas en la mente de muchos gestores de cambio y que por ejemplo las vacunas han logrado de alguna forma para cambiar la mente de las personas respecto a la prevención. Me encanta la palabra co-responsables y no víctimas en torno a los pacientes para así asegurar que cambiemos culturalmente como humanidad y empecemos desde tempranas edades a gestionar la salud naturalmente y en forma preventiva. De seguro en unas pocas generaciones esto podrá ser una realidad. Son demasiados actores involucrados en este cambio de pensamiento: pacientes sanos y enfermos, políticas publicas, agro-industria, sistemas de educación y hasta la religión o los sistemas de desarrollo espiritual. Echar mano de todos los ecosistemas para impactar en todas las audiencias es el reto y también como vemos el propósito de la humanidad (competir sin importar las afectaciones y las ganancias o cuidar los unos de los otros). Aquí probablemente esté la clave para empezar. Un saludo especial
Alexia me encantó tu reflexión! Ojalá podamos verlo, espero que no tarde muchas generaciones! Si todos trabajamos de la mano, lo lograremos